El Chelsea, a punto de hacer la compra más cara en la historia del fútbol femenino: la llamativa cifra que pagará

Chelsea tendría todo listo para romper el mercado de pases del fútbol femenino. No solo porque se llevará a la defensora estadounidense, Naomi Girma, una de las mejores jugadoras del planeta, sino también, porque este sería el fichaje más caro en la historia de este deporte. Y lo que más llama la atención, en ese sentido, es la cifra que deberá abonar.

Es que el Chelsea le pagaría a San Diego Wave, para llevarse a Girma, la cifra de 1.100.000 de dólares (890.000 libras esterlinas y 1.056.000 de euros), que haría de esta operación el fichaje más caro en la historia del fútbol femenino.

Es más que llamativo ver el número en contraste con lo que se paga en el fútbol masculino, lógicamente. Sin ir más lejos, el fichaje más caro en la historia del fútbol fue Neymar, quien pasó del Barcelona al PSG en 2017 a cambio de 222.000.000 de euros, es decir, 220.900.000 más que Girma.

De hecho, Girma, de 24 años, será la primera futbolista de la historia que será pagada por más de 1.000.000 de dólares, puesto que quien tenía el récord como la jugadora más cara de todos los tiempos era la delantera zambiana Racheal Kundananji, que pasó del Bay FC al Madrid CFF por 860.000 dólares en febrero de 2024.

Este 1.100.000 de dólares es más del doble del fichaje récord del Chelsea y el fútbol femenino inglés, que había sido la delantera colombiana Mayra Ramírez, por la que los Blues pagaron alrededor de 450.000 euros (384.000 libras esterlinas) más otros 50.000 euros en complementos. En ese momento, Ramírez había sido la compra más cara en la historia del fútbol femenino, hasta que un mes después se produjo el traspaso de Kundananji.

Aparentemente, a Girma, medallista de oro en los Juegos Olímpicos de París 2024 con la selección de Estados Unidos, también la buscaba el Olympique de Lyon (que estaba en serios problemas financieros), que también estaba dispuesto a abonar una cifra similar. Pero la defensora optó por los Blues, donde será compañera de sus compatriotas Catarina Macario y Mia Fishel.

Girma, de padres etíopes, juega al fútbol desde niña y brilló como jugadora en la Universidad de Stanford, donde también atravesó una lesión que podría haber impactado muy negativamente en su futuro: una rotura de ligamentos cruzados. Aunque no fue impedimento para ella: fue la primera elección del draft de la NWSL (máxima liga de fútbol femenino en Estados Unidos) de 2022, donde fue seleccionada por San Diego Wave.

Y desde su llegada a las Waves la rompió toda: ganó los premios a mejor jugadora defensiva del año y novata del año de la NSWL. En 2023, de hecho, repitió el título a la mejor jugadora defensiva del año.

Fue ese mismo 2022 donde hizo su estreno en la selección mayor de Estados Unidos, luego de haber estado presente en las juveniles, y también se destacó. En París 2024, por caso, se llevó la medalla de oro con el Team USA y la entrenadora Emilia Hayes se deshizo en elogios hacia Girma al afirmar que es «la mejor defensora que he visto».

Ahora, en el que será su salto histórico al Chelsea, buscará seguir agigantando su nombre.