The Last Dance: Messi, ante el último desafío del 2024

Se viene el Last Dance en la Bombonera. El martes será la última función oficial de Lionel Messi en este 2024 tan glorioso como accidentado (por varias lesiones) y con muchas particularidades. Justo cuando se cumplen dos años de la llegada del plantel a Qatar, Lionel volvió a entrenarse en el predio como si fuese un día más en la oficina, para encarar los últimos 90 minutos y para tratar de cortar una racha casi inédita en su carrera.

A los 37 años, Leo sigue siendo la referencia mundial. Nadie puede desbancarlo del trono de mejor jugador del mundo, más allá de que los premios individuales se los hayan dado a otros (como Rodrigo, que se quedó con el último Balón de Oro). Está claro que el tiempo pasa y que el cuerpo pasa factura, pero el 10, en un año que fue de los que menos jugó en su carrera, coleccionó dos títulos: Copa América en Estados Unidos y la Supporters’ Shield con el Inter Miami.

El final del 2024, por ahora, está lejos de ser el deseado por Leo. La sorpresiva eliminación en los cuartos de final de la MLS y el traspié en Paraguay lo remontaron a un escenario que vivió solo dos veces en su carrera. Leo viene de perder tres partidos seguidos (dos con el Inter y uno con la Selección) y eso sólo le había ocurrido en 2014 (el Barsa de Martino) y en 2016 (el Barsa de Luis Enrique). Es un dato anecdótico, pero no deja de llamar la atención, y si hay algo que demostró la Pulga a lo largo de sus 20 años como profesional es que no le da lo mismo ganar que perder.

Por eso, Leo quiere cerrar el 2024 con un triunfo con la Selección. Sabe que es importante para el grupo, que viene de recibir un golpe en Asunción: la Scaloneta dejó de ser un equipo regular. Es un bajón lógico después de tantos triunfos y de dar cuatro vueltas olímpicas en poco más de 1.000 días. Pero puertas adentro hay necesidad de que la última imagen que quedará de este año sea con una victoria, con el 10 como bandera.

Luego de 24 horas libres, Messi regresó con una sonrisa y con el compromiso de siempre con la Selección. El martes jugará su partido número 191 con la Albiceleste y tratará de romper la barrera de los 112 goles. Sabe Leo que después de este encuentro ya no habrá actividad oficial, ni con el club ni con la AFA. Que a lo sumo le podrán quedar algunos entrenamientos en Miami para luego entrar oficialmente de vacaciones. Unas vacaciones físicas y mentales que necesita.

Todos desean verlo en el Mundial 2026, pero Messi no se apura ni lo tiene decidido aún. Sabe que para llegar en buena forma a lo que sería su sexta Copa del Mundo, antes deberá ver cómo lleva un 2025 que tendrá cargado entre MLS, Concachampions, Mundial de Clubes y Eliminatorias. “Me preguntan un montón de veces en Argentina si voy a estar en el 2026. Quiero empezar bien el año con una buena pretemporada, que no tuve, y de ahí ir viendo”, dijo en su última declaración, a fines de octubre.

Leo tiene claro que precisa un 2025 distinto desde lo físico. Este año padeció la desgastante pretemporada por Asia de Inter de Miami y desde ahí comenzaron las lesiones musculares, que se repitieron en el primer semestre: estuvo parado varios días de febrero, abril y mayo. Llegó con lo justo a la Copa América, y en la final con Colombia, en una jugada desafortunada, sufrió un esguince en el ligamento externo del tobillo derecho que lo tuvo más de dos meses afuera de las canchas. Hizo una gran recuperación, no se apuró y volvió en buen nivel en el club y en la Selección.

El aprendizaje de lo que ocurrió es clave para el 10 y para el Inter Miami. Leo jugó apenas 25 partidos en el club en el 2024, pero claro que los hizo rendir como oro: 23 goles. Y en la Selección tampoco tuvo asistencia perfecta por las diferentes lesiones: jugó 10 de los 15 partidos de la Scaloneta y gritó seis veces. Suma un total de 35 partidos en 12 meses (con 29 goles y 17 asistencias) y, desde que agarró continuidad en Barcelona, solo había jugado menos durante un año calendario en 2006: estuvo en cancha apenas 33 veces, ya que también tuvo problemas musculares en el comienzo y en el final de ese año.

El primer encuentro del 2025 para Messi es un amistoso ante Orlando City el 14 de febrero, una semana antes del inicio de temporada regular en la MLS (22 de febrero), aunque para eso falta mucho. Primero, debe dar la última función con la Selección, recibir el cariño de la gente que tiene fresco el triplete con Bolivia, hace apenas un mes en el Monumental. Y todos sueñan con que Leo ponga replay y lo haga de nuevo.