Solari-Colidio, la dupla estilo Gallardo que empieza a asentarse en River

“A veces la actualidad de los futbolistas hace que haya tenido que ir tratando de buscar las mejores soluciones y alternativas para el equipo, a mí particularmente me gusta jugar con dos delanteros que puedan entrar y salir permanentemente, todo mi ciclo anterior ha sido así. En este caso hemos optado por darle ese espacio a Borja, un jugador que venía de hacer muchos goles, y que se siente mucho más cómodo estando en su hábitat natural, jugando de esa manera, solo, entonces buscamos alternativas. Hoy estoy buscando otras”.

La frase de Marcelo Gallardo después del triunfo de River a Instituto en Alta Córdoba todavía resuena en Núñez. Y no sólo porque lo más seguro sea que el Muñeco vaya a repetir por tercer partido consecutivo su delantera con Pablo Solari y Facundo Colidio este domingo ante Barracas en el Monumental: también resuena pensando a futuro.

Tan cierto es que fue el propio Gallardo quien pidió por la contratación de Miguel Ángel Borja en 2022 como que sus prioridades para reforzar la delantera en esa temporada habían sido Taty Castellanos primero y Luis Suárez después, dos nueves que tienen cualidades físicas y técnicas para “entrar y salir” del área. Y tan cierto como que, también, los grandes equipos del Muñeco en el MG1 tuvieron efectivamente duplas de ataque más dinámicas, sin tantos jugadores de rol o especialistas como el Colibrí.

Y aun cuando se advierte a lo lejos que River deberá salir en enero a buscar refuerzos de jerarquía para su delantera, con el dúo Solari-Colidio el entrenador encontró una tipología ofensiva que empieza a darle soluciones a un equipo al que le costaba demasiado convertir en el último tiempo. Mejores amigos fuera de la cancha, Pablo y Facundo se entienden bien también adentro: compartieron ataque en 40 ocasiones desde que están en River (varias de ellas, como extremos con un nueve más posicional como Borja) y combinaron bien, con 10 goles cada uno, cuatro asistencias de FC (dos a Solari) y siete de PCS (una a Colidio).

Menos atado a la raya y con más libertades de entrar y salir es como mejor rinde un Solari que tuvo su nivel más alto en Núñez, de hecho, en sus primeros partidos, jugando como segunda punta de Beltrán con el Muñeco como deté. Hoy a River le falta un delantero como el actual 9 de la Fiorentina, que salía a jugar y que tenía gol pero además una capacidad única de para la primera (arquero), segunda (central) y tercera (lateral) presión a la salida rival, pero en todo caso Colidio parece hoy el delantero más modelable para esa función.

Como Julián Álvarez y Beltrán en su momento, Colidio conoce todos los puestos de ataque y es el tipo de nueve que más representa a un Gallardo que salvo contadas excepciones no usó centrodelanteros de los que no salen del área: ni Gio Simeone ni Federico Girotti entraron en ese ideal de ataque titular en su momento, al que tampoco accedió un Iván Alonso que fue, con Borja, uno de los pocos killers posicionales que buscó en el mercado. Queda clara la intención de MG al repasar sus delanteras desde aquella primera dupla que formaron Teo Gutiérrez y Mora, pasando por Alario y Driussi, Scocco y Pratto, Borré y Matías Suárez…

En ese sentido, a priori tampoco parece encajar demasiado en ese formato un Adam Bareiro que es más funcional en términos de juego que Borja pero que de momento se muestra con traslados y movimientos lentos y sin lo más importante que es el gol: el paraguayo en todo caso sí cumplía en los papeles con las características que buscaba para el puesto un Demichelis con el que Beltrán se ganó un lugar a fuerza de rendimientos pero que casi siempre imaginó a nueves más clásicos de área como Rondón o Borja para pensar sus equipos.

Solari y Colidio todavía, claro, no están ni cerca de aquellas delanteras gloriosas del primer ciclo de Gallardo, pero de a poco empiezan a bocetar al menos ese estilo. Y a River empieza a darle resultados…