29/10/2024 21:37hs.
Peñarol llega casi out de las semifinales de la Libertadores, ya que debe remontar un 0-5 contra Botafogo. Y encima, después de reclamar y tratar de que la revancha se jugara sin visitantes por cuestiones de seguridad, le salió mal la jugada: en vez de ser local en el Campeón del Siglo, lo hará en el Centenario por disposición del Ministerio del Interior. Todo empezó con el maltrato de la Policía de Río de Janeiro, entonces el presidente Juan Ignacio Ruglio quiso evitar a los torcedores. Y le fue imposible.
En un principio comunicó Peñarol a Conmebol que iba a jugar solo con locales en su estadio, por una imposibilidad de garantizar la seguridad en el Campeón del Siglo. Pero llegó la advertencia de que eso no era posible, que se podía entonces cambiar la sede y jugar sin público. En un martes frenético a nivel cartas de ida y vuelta. luego intervino el Ministerio uruguayo y dio el ok para las dos hinchadas… ¡pero en el Centenario!
«Ante la probabilidad que se está manejando actualmente por parte de las autoridades de que se juegue en el estadio Centenario, la Policía Nacional y el Ministerio del Interior estamos de acuerdo que se pueda jugar ahí», indicó en una rueda de prensa su director, José Manuel Azambuya.
Pedidos y cambios
Este lunes, el Ministerio del Interior había decidido que el encuentro debía jugarse sin público visitante, tras los incidentes ocurridos la semana pasada en Brasil. «Los acontecimientos ocurridos en la ciudad de Río de Janeiro desencadenaron una serie de sucesos que aumentan en clima hostil, que no hacen más que pone en evidencia el alto riesgo que supone la disputa de dicho encuentro deportivo con ambas parcialidades», detallaba una carta enviada el lunes desde el Ministerio a la Asociación Uruguaya de Fútbol. Pero finalmente Conmebol anunció este martes que el partido de vuelta de las semifinales será en el Centenario. Con un milagro que busca Peñarol y que parece casi imposible: debe ganar por cinco goles para ir a penales…
Fuente: Olé