23/10/2024 23:27hs. Actualizado al 24/10/2024 00:07hs.

Justo el pibe. Se habló durante los últimos cuatro días, la pregunta que más se escuchó antes del cruce entre Boca y Gimnasia de la Plata en Rosario por los cuartos de final de la Copa Argentina fue: ¿ataja Leandro Brey o Sergio Romero? Claro, Fernando Gago tomó el toro por las astas y se animó a poner al pibe, que había rendido muy bien en la derrota de Boca ante Belgrano de Córdoba en el último encuentro de Diego Martínez. Sin embargo, la suerte le jugó una mala pasada al chico. El arquero xeneize salió a cortar un córner que lanzó Pablo De Blasis, pero se la desviaron en el camino y todo terminó en el empate del Lobo. Aunque el final era encantador, tras las dudas generadas a raíz de su notoria responsabilidad en el tanto del equipo platense, Brey infló el pecho y atajó cuatro de los cinco penales que ejecutaron los dirigidos por Marcelo Méndez.

Brey, de villano a héroe de Boca

Casualidad o causalidad. La noche venía tranquila para Boca, que fue más que Gimnasia durante todo el encuentro en el Coloso Marcelo Bielsa. Sin embargo, el Xeneize bajó un poco el ritmo en el complemento y pese a tener una gran chance en los pies de Marcelo Saracchi y luego en los de Miguel Merentiel, que se pasó de largo y no pudo concretar el 2-0 tras el rebote de Marcos Ledesma.

Copa Argentina  

Boca eliminó a Gimnasia en los penales

Tras ello, el Lobo se adelantó y se animó un poquito más. Claro, hasta ese momento, lo cierto es que a los de Marcelo Méndez le costaba muchísimo acercarse y crear peligro al arco de Leandro Brey, que casi no había tenido participación en la noche rosarino. A los 21 minutos del complemento y de la única forma que parecía ser posible, Pablo de Blasis lanzó un córner que quiso cortar el pibe de Boca, que terminó quedando lejos y tras un rebote dejó su arco al descubierto para que Martín Fernández ponga el 1-1.

Y era inevitable no pensar. Tras el gol del Lobo, todas las miradas se fueron sobre Sergio Romero, que estaba sentado en el banco de suplentes luego de ser relegado tras la derrota 3-0 del Xeneize ante Tigre en Victoria en la última fecha de la Liga Profesional. Aunque claro, la noche tenía un final especial para el pibito que llegó a Boca desde Los Andes.

Tras el pitazo final y con Gimnasia mejor parado desde lo anímico, el chico se hizo enorme bajo los tres palos y atajó cuatro de los cinco penales que le ejecutaron. Con un Chiquito Romero con una sonrisa inmensa por la actuación del pibe, que tuvo atajadas para todos los gustos cuando le patearon desde los 12 pasos, Boca clasificó por Brey, que paso de ser villano a héroe xeneize.

El error de Brey en el empate de Gimnasia

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Fuente: Olé

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