Diego Martínez y el detalle de los cambios agónicos en los partidos de Boca

Más allá de las polémicas declaraciones de Martín Demichelis sobre los cambios de Diego Martínez en el superclásico, hay una particularidad que se repite: en todos los partidos, el DT de Boca realizó modificaciones en los últimos minutos, con poco tiempo por jugar..

Si tomamos en cuenta desde los 80 minutos hasta el final de cada una de estas siete fechas, Martínez realizó cambios en algunos casos por cansancio y en otros buscando alguna variante táctica, pero siempre con poco margen de acción para quienes ingresan. Y la mayoría, tienen el mismo parámetro: puesto por puesto.

Pero tal vez el dato más destacado son los 13 cambios que realizó en esos 10 minutos finales durante las primeras siete fechas. Es decir, casi dos modificaciones por partido en la agonía de los encuentros.

Por ejemplo, con Platense, el día de su debut, puso a Pipa Benedetto en lugar de Langoni (que estaba jugando de delantero), a los 83′. Es decir, al goleador le dio sólo siete minutos y el adicional para el goleador.

Luego la segunda fecha contra Sarmiento cambió a Janson por Pol Fernández a los 84′, lo que pareció modificar el esquema, pero la realidad es que en cancha estaba Saralegui jugando de ocho, entonces puso al ex Vélez en dicha posición y al juvenil lo pasó a jugar de doble cinco.

Su primera victoria fue con Tigre en la tercera fecha, con goles de Darío Benedetto y Miguel Merentiel. Allí con el resultado a su favor, realizó cuatro cambios en el final: Mauricio Benítez (por Saralegui) y Langoni (en lugar de Blondel) a los 82′ y Briasco por Merentiel y Janson por Zenón a los 87′.

Lo mismo pasó en su primer partido en la Bombonera contra Defensa: ingresó Fabra por Blanco y Briasco en lugar de Pol al minuto 90. Fue la noche que la Bombonera silbó a Fernández al salir y al colombiano al entrar, que casi no pudo tocar la pelota por el poco tiempo que estuvo en cancha.

En la fecha cinco, con el partido 2-0 a favor de Boca ante Central Córdoba, el DT podría haber probado una variante diferente pero decidió seguir por el mismo camino. Sólo ingresó Ramírez en lugar de Zenón, nuevamente, puesto por puesto, a los 87′.

Y lo en el partido que estaba 0-2 contra Lanús, no decidió romper el equipo y hacerlo ultra ofensivo, sino que puso a Langoni en lugar de Medina a los 80′ e hizo cambio de laterales a los 85′: Blanco por Saracchi y Blondel por Advíncula. Eso sí, el ex Tigre terminó marcando el descuento.

Además de las modificaciones que mete en cancha, Martínez también modifica y estudia mucho al rival en la previa. En los siete partidos que van de esta Copa de la Liga, una vez sola repitió el 11 inicial: en el duelo ante Defensa jugaron los mismos que vencieron a Tigre. Todo una muestra de que confía en su análisis previo realizado con su cuerpo técnico y no lo modifica.

La particularidad es que en el superclásico fue la primera vez que el entrenador buscó cambiar lo planificado en la previa. Al cambiar a Kevin Zenón por Frank Fabra y a Cristian Medina por Nicolás Valentini al minuto 79, modificó el esquema: pasó del 4-4-2 al 5-3-2, aunque no resignó la idea de atacar. Anteriormente habían ingresado Blondel y Langoni por Saralegui y Cavani. Pese a que en los nombres sonó a movida defensiva, no lo fue. Si se observa el mapa de calor de Blondel o Fabra, sus zonas calientes son de mitad de cancha para adelante…