Hoy iniciaron formalmente las clases en toda la provincia, luego de que el primer día del ciclo lectivo 2023 se viera afectado por un paro docente en relación al inicio del juicio por la causa Fuentealba II, que busca determinar las responsabilidades políticas de la muerte Carlos Fuentealba en 2007.
Uno de los principales desafíos que se tuvo que atravesar antes del inicio de las clases, además de la negociación salarial con el gremio docente, fue la adecuación de los edificios escolares. “Apenas terminó el ciclo lectivo el 23 de diciembre se empezó a trabajar en un plan de mantenimiento de infraestructura. Por otro lado también en edificios nuevos que estaban ya en construcción”, explicó Osvaldo Llancafilo, ministro de Educación y Gobierno de la provincia.
El ministro detalló que hay 695 edificios escolares del sistema educativo, de los cuales 669 son propios y 26 son alquilados. De ellos, entre el 96 y el 97 por ciento pudieron empezar las clases sin ninguna dificultad.
Problemas edilicios
Son 21 las escuelas que no pudieron iniciar el dictado de clases. “Uno que no arranque para nosotros es importante”, expresó Llancafilo, y manifestó que los edificios que no están en condiciones se deben a “particularidades”. Es el caso de la escuela 201, cuyo SUM tiene problemas estructurales y que durante el año pasado estuvo clausurado, o en el CPEM 40, que está en condiciones de iniciar las clases pero debe independizarse el espacio físico para obras de ampliación.
Llancafilo también se refirió a las partidas escolares, que incluyen tanto refrigerio para los alumnos como gastos generales. Según comentó el funcionario, en la mesa salarial se acordó un 60% de aumento en estas partidas y actualizaciones por IPC cada tres meses.
Desde el Ministerio de Educación pusieron a disposición el número 2995833823 para que padres, madres o alumnos puedan comunicarse y plantear sus dudas en cuanto al inicio de clases y la situación de cada escuela en particular.