A pocos días de terminar su gestión como presidente de la Sociedad Rural del Neuquén (SRN), Diego García Rambeaud realizó un balance de los tiempos que corren, hablo de los proyectos de la entidad y dijo que “el campo neuquino tiene un gran porvenir”.
Se viene una nueva edición de la exposición, ¿qué nos podés contar?
Sí, correcto. Del 25 al 29 estamos con la octogésima exposición acá de la Sociedad Rural de Neuquén (SRN) y la doceava de caballos de la Patagonia, así que con un cronograma muy nutrido de actividades como el Campeonato de Polo.
Con una Cordillera que está explotada además de gente, ¿no?
Así es, está realmente lleno de turistas, y es muy importante para la economía y toda la actividad turística hotelera, gastronómica de la zona, así que, eso es un muy buen escenario para todos estos eventos.
Te toca despedirte de la presidencia, ¿no?
Si, ya estoy terminando mi segundo mandato, de dos años. Hemos trabajado junto a toda la comisión directiva.
¿Te animás a hacer un balance?
Creo que hemos tratado de la mejor forma de representar al campo neuquino, a los socios de la entidad, de expresar las problemáticas y las ideas de trabajo también hacia el Gobierno provincial y el trabajo también conjunto con la Sociedad Rural Argentina (SRA). También tenemos mucho para anotar y poder seguir trabajando desde la Comisión Directiva en esto de estar vinculados y de estar presentando ideas de trabajo en conjunto con las autoridades provinciales para que se lleguen a los mejores resultados. Creo que, en ese sentido, hemos cumplido con lo que teníamos propuesto.
Desde la Comisión Directiva hemos tratado de representar de la mejor forma las ideas y las propuestas de los socios, de reflejar también las problemáticas y de generar un buen intercambio de trabajo, y constructivo con las autoridades provinciales. Hemos estado permanentemente trabajando con la Secretaría de Producción, con Facundo (López Raggi) como ministro, para poder abordar los temas, proponer, participar y escuchar todo lo que se está trabajando.
Así que en ese sentido consideramos que hemos hecho un buen trabajo, repartido, en equipo, con todos los miembros de la Comisión Directiva.
“Han sido momentos muy difíciles para el campo neuquino”
La ganadería neuquina viene sufriendo algunos embates, ¿no? Cenizas, pandemia, sequía…
Si y el tiempo que lleva armar las estructuras de los ciclos productivos. En la precordillera sufrimos 12 años de sequía, dos eventos volcánicos, que obligaron a buscar las mejores estrategias para poder paliar esa situación; reubicar la hacienda, en algunas ocasiones mal vender para poder salvar ese capital que lleva muchísimos años poder hacerlo.
Y este invierno fue distinto. Lógicamente hoy la situación de los pastizales es otra, llovió y nevó más; y tuvimos una muy buena primavera.
Ahora con las temperaturas que tenemos, ya se ha secado ese pastizal, y hay mucho volumen, pero el campo necesita siempre estar adaptándose; el productor lo hace permanentemente.
Claro, el año pasado que la vaca valía y que tenía un destino a China, cerraron la exportación de un animal que termina muriendo como se mueren ahora las vacas en Santa Fé, en Entre Ríos…
Con malas decisiones, y con políticas como nos pasó el año pasado ya probadas y que dan pésimos resultados para el objetivo que se quiere buscar, se puede hacer muchísimo daño a las economías regionales. Y esa es la función de entidades como la Sociedad Rural: expresar y enseguida reaccionar a esas medidas, buscar en el diálogo, lógicamente, la mejor solución.
Han sido momentos muy difíciles para el campo neuquino cuando por decisiones arbitrarias se cerró la exportación y la vaca vieja -una categoría que acá no tiene mercado que no se consume, que es carísimo engordar para destino faena- muchas de esa hacienda quedó en los campos comiendo y ocupando un lugar que no sobraba; producto de decisiones inconsultas y sin mirar lo que puede pasar, ¿no?
En tu gestión se avanzó en proyectos como empezar a integrar a La Rural a los ámbitos educativos, a la juventud, buscando la vuelta de estar presentes en los acontecimientos más relevantes que tienen en Junín de los Andes. ¿Va a continuar esta línea de trabajo?
Si, son todas ideas conversadas, charladas y trabajadas desde la Comisión Directiva que busca acercar y, sobre todo, informar de lo que en el campo se hace, lo que en los predios uno desarrolla todos los día. Nuestra idea es continuarlo porque son decisiones de Comisión Directiva que tiene mucho respaldo y creemos que es muy bueno, así como recibimos ya en varias exposiciones de noviembre a jóvenes, interactuar con chicos de las escuelas primarias, hacer actividades didácticas, mostrarles lo que el campo hace. A veces las tecnologías sacan a los chicos de lo más tradicional y de lo más sano que tiene el campo en ese sentido, y con esa intención tratamos de llegarles a ellos y hacerles actividades para que conozcan lo que se hace y lo vean de primera mano.
Nunca tuvieron que discutir cuestiones de género ustedes, porque siempre laburaron codo a codo, ¿no?
Totalmente es así, para nosotros el respeto de género existe, existió y en cuanto a las responsabilidades y a las formas de trabajo siempre se ha ido a la par, así que, en ese sentido es un tema que para nosotros es importantísimo, pero que también siempre está presente.
El hecho de plantear recambio generacional, que siempre es tan necesario, también es una muestra de cómo van evolucionando, ¿no?
Así es. La institución este año es la exposición número 80, y cumple la Sociedad Rural de Neuquén 90 años de vida institucional dentro de la provincia, lo cual muestra y da el respaldo de todas las acciones que se han hecho durante estos 90 años.
Sobre todo mantener los valores, los principios, la cultura del trabajo, el arraigo a la tierra, la perseverancia y el nunca bajar los brazos, tanto en lo productivo como en la representación que le toca hacer a la Sociedad Rural.
Hay un gran número de personas que buscan mantener todos esos valores. Así que ésta es la labor nuestra, creo que todos los que estamos, estamos con un convencimiento muy firme de lo que queremos y de lo que hacemos producto de varias generaciones de trabajo dentro de la provincia. Para nosotros es un ejercicio casi natural el hacer lo que estamos haciendo, que es representar.
Los productores deben convivir con otras actividades, como el turismo o los hidrocarburos. ¿Cómo mira el dirigente rural que está en cordillera a una actividad como la hidrocarburífera?
Por suerte, la matriz productiva de la provincia es amplia, diversa y cuenta con potencialidades como lo es Vaca Muerta, pero también como lo es el turismo y todo lo que representa el sector primario productivo que está disperso de punta a punta.
La actividad agropecuaria, la dispersión demográfica que genera y la importancia que tiene, como arraigo y como pertenencia a cada rincón de la provincia, hace que sea muy importante quizás a veces mal comparada con los volúmenes que puede generar la industria hidrocarburífera. Pero en ese sentido, y algo que hemos venido conversando, la provincia tiene una potencialidad enorme en contrarrestar, quizás, sobre todo en discusiones como las que se dan hoy en misión de carbono, fijación de carbono y la incidencia que tienen para el ambiente. Todo lo que representa carbonífera, el campo neuquino, el campo en general, con el cuidado de los pastizales, con la ganadería como herramienta, con esa protección de los ambientes, tiene una potencialidad enorme en contrarrestar todo lo que por ahí esas producciones pueden generar. Creemos que el campo hoy para la provincia tiene un gran porvenir en ese sentido, en la protección del ambiente.