Cuando el calor se vuelve sofocante y es imposible salir a la calle, nos refugiamos en nuestros hogares, en la pileta, el aire acondicionado, delante del ventilador o tomamos algo frío. Pero nuestros amigos peludos no tienen tanta suerte.
Las altas temperaturas los castigan y, como dueños y compañeros responsables, debemos hacer lo posible para ayudarlos. En dialogo con LU5, Fernando Saiz, médico veterinario y amigo de los animales, explicó cómo podemos darles una a mano a aquellos que tanto nos alegran todos los días.
El gran problema de esta estación son los golpes de calor. “Los perros no tiene mucha superficie de transpiración, aunque naturalmente ellos pierden pelo cuando se acercan las temporadas de calor, con estas temperaturas de más de 30 grados es un riesgo”, explicó el veterinario.
Para aquellos perros o gatos que pasen mucho tiempo en los patios, el principal recaudo que tenemos que tener es que dispongan de sombra, ya sea natural o artificial, para poder resguardarse de los rayos ultravioleta. Y no olvidarse de refrescar ese piso.
Al momento de sacar a pasear a los perros es fundamental evaluar si la temperatura del suelo es adecuada. “Hay que apoyar la mano en la vereda. Nuestra tolerancia al calor es mucho menor que la de las patas del perro. Si puedo apoyar la mano, el perro va a estar más cómodo. Si no, claramente el no puede caminar“, detalló Fernando. Además aclaró que si a la hora de querer sacar al perro nosotros necesitamos gorra y protector, eso es señal de que no es adecuado realizar el paseo.
Una de las principales señales de que un perro está cansado o tiene calor es el jadeo. Para ellos, es una forma de refrescarse. Sin embargo, es una señal de alarma en el caso de nuestros gatos. “El gato puede tener la boca abierta, ver que aumenta su frecuencia respiratoria. Está bien. Pero si veo un gato jadeando es un problema, ese gato tiene que ir al veterinario“, alertó el especialista.
Para las mascotas a las que les gusta bañarse, una buena opción siempre es mojarlos. Ya sea con una manguera o de la forma que resulte más practica. Sin embargo, no es recomendable para aquellos animales que no estén acostumbrados. “Ellos, como nosotros, aumentan la frecuencia cardíaca cuando se asustan. En vez de bajar la temperatura, vamos a subir. Pero sí sirve refrescarle las patas o la panza”, destacó.
En cuanto al pelo, funciona como una barrera térmica. “Si lo vamos a pelar, que no sea a cero, que le quede pelo. La piel puede quedar expuesta a los rayos UV y hacerle lesiones en la piel“, recomendó el veterinario. Para prevenir el calor es preferible cepillar el pelaje antes que cortarlo.
“Si nosotros estamos cómodos dentro de nuestra casa, ellos van a estar cómodos”, reiteró Fernando. “La precaución hay que tenerla en el exterior”, agregó.
Algunas recomendaciones para ayudar a nuestras mascotas
- Agua fresca, renovada
- Varias ofertas de agua
- Baldear los pisos pavimentados
- Ofrecerle sombra
Golpes de calor
“El golpe de calor es un problema clínico. El animal está enfermo, va a sufrir múltiples problemas de corazón, de riñón. Muy probablemente va a tener un desenlace fatal”, advirtió el Fernando.
Algunos síntomas del golpe de calor son los siguientes:
- Jadeo incesante
- Respiración dificultosa
- Alta fiebre (letargia, dificultad para el movimiento, nariz muy seca, ojos opacos).
- No beber agua
- No hacer pis
- Bloqueo renal
Ante estos síntomas, acudir inmediatamente a un veterinario.