Lucas Campagnolo (Alegrete, 27) atravesó la mejor temporada deportiva de su carrera: culminó la Race 2022 en el puesto 18, llegando incluso al último torneo del calendario regular con posibilidades matemáticas de clasificarse al Barcelona Master Final. La final en el Miami Open y las semifinales en el Estocolmo Open y el Menorca Open lo catapultaron a los primeros planos del pádel mundial.
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La primera parte del año lo disputó junto con Javi Garrido jugando en la derecha, pero tras el revoleo de cambios de pareja debió readaptarse al revés para compartir pista con Jon Sanz. Sin embargo, para 2023 anunció un proyecto ilusionante: volverá al drive para jugar con Maxi Sánchez (Villa Mercedes, 36).
Así lo contó Olé y lo confirmaron los jugadores. En este caso, el brasileño atendió virtualmente a este medio mientras se recupera de un raid más que ajetreado de cierre de año.
– ¿Cómo y cuándo te llega el llamado de Maxi Sánchez para 2023?
Unos días antes del Master Final. Gente cercana me había comentado la posibilidad pero él aún no me había escrito, y la verdad es que estaba muy pendiente de ver qué pasaba. Hace un tiempo en una nota para World Padel Tour dije que él era un referente para mí, entonces cuando me llamó, no lo dudé. Me dijo ‘si querés pensalo y después me respondés’ pero yo le dije ‘no tengo que pensar nada: la respuesta es sí, quiero juntar contigo’. Y chau. La verdad es que yo había cerrado con Jon (Sanz) en México, una semana antes, pero siempre le dije que si alguno de arriba me llamaba para jugar en la derecha, yo iba a aceptarlo. Mi objetivo era volver a jugar en la derecha. Entonces lo llamé a Jon y él fue un caballero: lo súper entendió, me felicitó y me aseguró que el día de mañana quiere volver a intentarlo juntos.
– Esa clausula de ‘mirá que si me llama alguien de arriba’ se repite mucho.
Al final es normal pero te soy sincero sobre mi caso: quería jugar en la derecha pero no tenía otras opciones sobre la mesa, entonces prefería seguir intentándolo desde el revés con Jon. Pero cuando me llama Maxi, que me permite volver a la posición en la que mejor jugador me siento y más me permitirá crecer, me decidí.
– ¿Qué hablaron en esas charlas? ¿Qué le prometiste?
Yo le dije que no me pida que haga jugaditas lindas, que la saque por la puerta o que haga dejadas, pero sí que me comprometía a trabajar todos los días al 100% y a luchar todas las bolas como siempre lo he hecho. Y él me respondió que fue todo eso lo que lo llevó a llamarme. En la vida soy sincero y no puedo vender cosas que no hago.
– ¿Cuándo empezarán con los entrenamientos? ¿Y quién los entrenará?
En esa llamada teníamos un par de nombres en vista y el primero que nos gustó fue Rodri Ovide. Le hemos llamado y nos aceptó, así que él será nuestro coach. Todos los jugadores que pasan por él tienen una mejora importante y lo he visto de cerca, así que me motiva mucho. Maxi (Sánchez) viaja cerca del 15 a España pero como yo me caso, estaré llegando el 23. Así que el 24 mismo ya comenzaremos a entrenar juntos.
– Y te presento una hipotética situación: si dentro de cuatro torneos otro jugador de arriba, como puede ser Chingotto, llama a Maxi Sánchez, ¿vos cómo entenderías esa situación? ¿Dónde está el límite?
Pienso que en el futuro muy cercano, las parejas estarán reguladas por contratos con cláusulas: si quieres romper, indemnizas al otro y listo. Como un equipo de fútbol. “¿Me querés dejar? Pagá esto y chau”. Pero mientras tanto hay que dejar las cosas claras de entrada. Hay que decir: “Mirá hermano, si surge esto…” Porque aquí todos sabemos cómo es el mundo del pádel. Todos, lamentablemente, somos muy resultadistas y se ha instalado eso de que si no ganamos, somos malos y hay que cambiar.
– Vienen de tener una de las temporadas más cargadas de la historia reciente del pádel. ¿Qué pronosticas para la próxima?
Que a nivel descanso va a ser parecido o peor. Nos van a agotar. Salvo si las dos partes se ponen de acuerdo, será un año complicado para los jugadores. Yo he llegado hace dos semanas a Brasil y todavía no he tocado la pala. Sólo gimnasio porque sino me pongo gordo de tanto comer asado, pero necesitaba descansar la cabeza de tanto pádel para despegarme de todo porque si durante el año no estás metido al 100%, no te va bien.
– ¿Hubo algún momento donde la carga de torneos se te hizo insoportable?
La única vez fue al final del año, en aquellos viajes a México. Muy largo, muy pesado. Lo ideal sería que, como la mayoría reside en Europa, los últimos torneos sean cerca. Fue el único momento donde pensé ‘uf qué largo se me está haciendo’.
– En el medio, un cambio de pareja con pase del drive al revés.
Sí. Lo que pasó con Javi (Garrido) fue el calentón del momento. Creo que la entrevista que hice un día después de que pasara todo no debía haberla hecho. Yo soy de cabeza caliente y no mido mucho las palabras, entonces siempre digo lo que pienso. Quizás era con otras palabras. Nadie hizo nada que no se pueda hacer, entonces a mí me correspondía aceptar.
– ¿Cómo quedó la relación entre ambos?
Cuando vi la repercusión que había tenido, estaba mal. Javi (Garrido) es un chico buenísimo que va a ser de los mejores del mundo y no me apetecía que se genere un ambiente tieso, cargado y pesado. No sería yo. Le escribí para quedar y hablarlo personalmente pero por temas de viajes, compromisos y entrenos, no pudimos juntarnos. Entonces le mandé un mensaje: “Antes de verte en algún torneo, te tengo que decir un par de cosas…” Y él me contestó super bien. Después jugamos en Buenos Aires juntos y cuando terminó, nos dimos un fuerte abrazo y nos agradecimos el uno al otro. Hoy te digo que quedó todo bien.
– ¿Te quedaste conforme con el cierre de temporada?
Pasado todo lo que ha pasado, haber terminado como suplente para el Master Final ha sido un logro tremendo. Te digo esto: en el momento en que Javi (Garrido) elige jugar con Chingotto, pensé que mi temporada terminaba ahí. Me bajoneé pero nunca dejé de trabajar y mi equipo siempre me mantuvo. Lo que más destaco es que me volví a valorar yo mismo dentro de una temporada exigente.
– En Menorca, Alex Corretja ha presentado una propuesta de renovación de contrato de World Padel Tour. ¿Qué te pareció la misma? ¿La firmaste?
Es una pregunta trampa. Prefiero no meterme mucho en ese tema porque no soy de los que más metido está ahí. Lo que te diré es que yo no he firmado, pero también creo que el pádel no está para tener dos circuitos. Es mi opinión, ¿vale? Ojalá que se arreglen entre los dos circuitos para hacer lo mejor para el deporte a nivel mundial.
LA SITUACIÓN DEL PÁDEL EN BRASIL
– Quiero preguntarte por lo que vivió Brasil en el Mundial de Dubai. Sorpresivamente han caído al quinto puesto. ¿Qué valoración hacés del torneo y qué expectativas tenés para el futuro?
Sin quitar méritos a Portugal que nos eliminó, nuestro Mundial ha sido pésimo. Pero hago la siguiente reflexión: Lima venía de ser campeón una semana antes ganando la final a Galán-Lebrón, Bergamini tuvo el mejor año deportivo de su carrera y yo, el mejor de la mía. Y el seleccionado bajó de puesto. Luego están los que viven en Brasil. Todas las demás selecciones están muy profesionales y Brasil no llevó una selección 100% profesional. No tengo problemas en decírselo: no puede ser que estemos en un Mundial y no pises el gimnasio ni un día. No puede ser. Eso se notó. Tenemos un seleccionado formado por buenos jugadores pero sólo eso. No buenos deportistas. Y el futuro será complicado porque no veo recambio, no veo a jóvenes de abajo que empujen. Sería muy fácil culpar a la Federación (COBRAPA) pero a mí, a Pablo y a Bergamini tampoco nos ayudaron y nosotros hicimos nuestro camino solos. Y yo también dejo de estar una semana en mi casa con mi familia para ir al Mundial, eh. Hay muchos jugadores que no trabajaron tanto como yo para llegar de la mejor manera posible y hacer lo mejor para Brasil, y entonces no sé hasta dónde es una falta de respeto para con nosotros.
Fuente: Olé