Si bien muchos dicen que el capitán de la Selección argentina, Lionel Messi, es un alienígena, está vez los extraterrestres no tienen nada que ver. Charly Faricelli es un ingeniero agrónomo especializado en la agricultura de precisión y comenzó una campaña en apoyo a la “Scaloneta”.
Como homenaje por conseguir la tan ansiada tercera Copa del Mundo algunos decidieron tatuarse, pero Charly decidió trasladar su fanatismo por el fútbol a su otra pasión: la agricultura. La campaña inició en noviembre y se replica en más y más campos de cultivo en todo el país.
“Para los que somos agrónomos y apasionados a la agricultura, el maíz es un cultivo que hay que tenerlo bien y responde al manejo bueno y al manejo malo, así que se manifiesta muy rápidamente”, explicó el ingeniero sobre la elección del maíz para realizar las “impresiones”.
“No es lo mismo hacer un Messi ahora que hace 10 años. La maquinaria está muy avanzada. Igualmente ambos salen porque el cultivo hace lo que el agrónomo le pide”, aseguró aunque en el pasado los dibujos no tenían la precisión que se puede conseguir con la tecnología actual.
La diferencia con aquellos que se estampan el rostro del “10” o las tres estrellas en la piel, es que la campaña comenzó mucho antes de que la delegación argentina levantara la copa. “Todos estuvieron dispuestos a hacerlo, incluso ante un escenario de sequía que es infernal”, comentó Charly.
Para realizar los dibujos en las distintas plantaciones se utiliza semillas o fertilizante en mayor o menor proporción, dependiendo que parte es la que se esté dibujando. Por ejemplo, la barba del jugador va a requerir más siembra por metro cuadrado que aquellos sectores que no necesitan tanto detalle. Esto se logra fácilmente con un archivo que va directamente en las máquinas que realizan la siembra.
Se puede encontrar cierto paralelismo en las canchas de fútbol. En ese caso se hacen distintos tipos de poda en el césped, en distintos largos y direcciones, para crear distintos diseños que muchas veces son característicos de cada estadio.
Sin embargo, vale aclarar que estas creaciones se pueden visualizar desde cierta altura o ángulo, pero que -en el caso de las canchas- los jugadores no lo ven. Lo mismo ocurre con las plantaciones.
“Cuando se cosecha el maíz se sigue viendo la cara de Messi”, destacó Faricelli, y aseguró que “se va a poder ver este y el año que viene muy nítidamente”.
Según dijo el agrónomo, “el objetivo fue un tributo a Messi y a la Selección apostando al Mundial. Mi iniciativa nunca fue comercial y quería sembrarla. Yo le pasaba el archivo a los demás. A la mayoría de la gente que la sembró yo no le vi la cara, me pidieron el archivo por Twitter“.
Además, explicó que la práctica se podría adaptar al tipo de plantas y árboles que se encuentran en el Alto Valle (viñedos, manzanos y perales). Hay un antecedente en una estancia del sur de Córdoba en donde un hombre homenajeo a su esposa utilizando distintos tipos de árboles.
“Antes del mundial había tres ‘Messi’, y después del perder el primer partido me pidieron el archivo 10 personas”, dijo emocionado Charly, y contó que el número aumentó a 18 al día de la final.
Hoy el número asciende a 24 y espera que siga creciendo con el correr de los días.