Wenger polémico: «A los equipos que se centraron en manifestarse políticamente les fue mal»

Arsene Wenger quedó en el medio de una polémica por una frase suya en una entrevista. El famoso ex entrenador del Arsenal de Inglaterra y actual jefe de desarrollo del fútbol global de la FIFA, dijo: «Al ir a la Copa del Mundo, sabes que no tienes que perder el primer partido. Francia, Inglaterra, Brasil jugaron bien el primer juego. Y también aquellos equipos que estaban mentalmente preparados para la competencia y no para manifestaciones políticas».

Sin mencionarlo, la crítica de Wenger pareció un tiro por elevación para Alemania, que justamente perdió el primer partido, ante Japón, y que luego quedó eliminada en la primera fase del Mundial. El conjunto alemán se destacó por su protesta al no poder utilizar el brazalete «one love» por las amenazas con sanciones de parte de la FIFA. En el debut ante Japón, el equipo teutón posó para las fotos con sus jugadores tapándose las bocas en señal de protesta.

Siete selecciones europeas, entre ellas Alemania, tenían pensado usar ese brazalete en el Mundial pero optaron por no hacerlo para evitar sanciones. Dichos brazaletes, con el dibujo de un corazón rayado por diferentes colores, tenían como objetivo promover la inclusión y mostrar solidaridad con personas de diferentes géneros e identidades sexuales. Una de esas selecciones era Inglaterra.

Los usuarios de las redes sociales criticaron que Wenger estableciera una correlación entre las protestas de los equipos y el bajo rendimiento en el campo.

“Comentarios vergonzosos de Wenger”, escribió en Twitter Craig Foster, un ex mediocampista australiano convertido en activista de derechos humanos. “Los derechos humanos no son política, Arsene”, agregó Foster, “y los valores no deberían estar a la venta”.

Otros destacaron las inconsistencias en los comentarios de Wenger, señalando que los jugadores de Australia criticaron públicamente el historial de derechos humanos de Qatar antes de la Copa del Mundo antes de proceder a desafiar las expectativas en el campo y clasificarse para las etapas eliminatorias.

Qatar, un país donde el sexo entre hombres es ilegal y se castiga con hasta tres años de prisión, ha sido criticado por su postura sobre los derechos LGBTQ antes y durante la Copa del Mundo.