Fue un momento particular. Porque, por lo general, cuando hay visita de los familiares a la concentración argentina, el acceso suele darse por otros sectores, lejos de donde se ubica normalmente para prensa para acceder a los entrenamientos abiertos. Sin embargo, esta vez, el ingreso al búnker de la familia de Leo Messi se pudo ver en vivo y en directo. Incluso, hasta el propio capitán apareció detrás de la reja para recibir a Antonela y a sus tres hijos, con quienes compartió el post práctica y el ya tradicional asado post partido.
La cuestión es que la camioneta que llevaba a Antonela y a los tres hijos del capitán argentino apareció en una de las puertas a las que se accede al predio manejada por Marito, el famoso utilero de la publicidad de la camiseta de Messi. El se había encargado de acercar a la familia de Leo al búnker argentino, pero de repente, como la reja de ingreso por ese sector estaba cerrada, la familia del 10 se bajó del auto para ingresar caminando, mientras Leo los esperaba del otro lado. Una situación que fue captada por las cámaras de ESPN.
Una vez que llegó la orden de que la camioneta pudiera entrar al predio de la Universidad, Anto, Thiago, Ciro y Mateo se volvieron a subir y ahí se encontraron con papá Leo del otro lado, quien había llegado al sector en el tradicional carrito de golf, que acá se usa para agilizar los traslados. Una imagen sin dudas particular, porque ahí se lo podía ver al crack argentino, con el buzo colgado de sus hombros, esperando para acompañar a su familia como cualquier hijo de vecino, tal cual diría el dicho popular.
Una vez que la camioneta ingreso, fue Leo quien se sumó y ahí fueron directamente con su familia a la zona exterior del búnker donde los jugadores reciben a los suyos y donde luego compartieran el tradicional asado que se hizo costumbre después de los partidos de la Selección. Así, no sólo la familia del 10, todos juntos celebraron la clasificación a octavos y la continuidad de un sueño que tiene motorizados a todos los argentinos.
Fuente: Olé