Con la negativa de la FIFA sobre dejarle utilizar un brazalete con los colores de la bandera LGTBIQ+ aún fresca, Alemania le dio vuelta la cara al ente rector del fútbol. En esta oportunidad, los tetracampeones debían dar una conferencia de prensa y, como está reglamentado, debían concurrir el director técnico y al menos un jugador. Esto, por decisión del técnico Hansi Flick, no se cumplió y la federación germana será sancionada.
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¿La razón? El tiempo de viaje. Alemania fijó su base de operaciones a 100 kilómetros del centro de Doha, en el Al-Shamal Stadium de Al-Ruwais. Siendo que para asistir a las conferencias deben recorrer esa distancia, Flick quiso que sus jugadores descansaran lo máximo posible para el duelo siguiente -se enfrentarán a España este domingo a las 16-.
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«No queremos tener que someter a ningún jugador a un desplazamiento tan largo, es mucho tiempo conduciendo. Todos los jugadores son importantes y por eso no hemos traído a ningún jugador con nosotros, deben prepararse para el entrenamiento que tenemos esta tarde. Creo que también podríamos haberlo hecho en nuestra sede. Hubiera sido lo mejor. Estamos decepcionados, creo que tenemos un centro de medios realmente bueno. Así son las cosas. Tenemos que aceptar eso, como tantas otras cosas«, explicó el DT de la selección alemana.
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La cuestión de los brazaletes
Luego de que siete federaciones europeas solicitaran utilizar el brazalete One Love en cada uno de sus partidos, llegó la contundente respuesta de la FIFA con el torneo ya empezado: se amonestará a todos los capitanes que usen el brazalete con la bandera del orgullo LGBTIQ+.
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Y pese a jugadores como Harry Kane y Manuel Neuer se habían manifestado a favor de usarlo, tras la presión de la FIFA, el grupo de federaciones UEFA integrado por Inglaterra, Países Bajos, Gales, Bélgica, Suiza, Alemania y Dinamarca publicó un duro comunicado anunciando que se verían obligados a revertir su intención de utilizarlos.
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«La FIFA ha dejado muy claro que impondrá sanciones deportivas si nuestros capitanes usan los brazaletes en el campo de juego. Como federaciones nacionales, no podemos poner a nuestros jugadores en una posición en la que puedan enfrentar sanciones deportivas, incluidas las tarjetas amarillas, por lo que tuvimos que pedirle a los capitanes que no intentaran usar los brazaletes en los partidos del Mundial», rezaba el comunicado.
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Fuente: Olé