Borja, el 9 solidario que tiene River

Es un 9 laburante. Que se toma vacaciones pero eso no lo exime de comprometerse con los que más lo necesitan y que están bajo su ala. “El hambre me llevó a superarme. Les hacía mandados y les limpiaba los patios a los vecinos para ganarme un dinero para ir al colegio. Eso nunca se olvida”, decía Miguel Ángel Borja en abril de 2020 en una entrevista con el sitio De Grueso Calibre, recordando aquella infancia dura que talló su personalidad y que nunca olvida. Experiencias que motivaron su compromiso con la Fundación Miguel Borja, la cual tiene como principal benefactor y a la que se acercó ni bien pisó Tierralta para comenzar su período de descanso pre competitivo.

Apenas pisó su tierra, Borja se sentó con los integrantes del staff que comanda a la Fundación que él preside desde 2014. Ubicada en un terreno de cuatro hectáreas que compró como inversión personal y en la cual funcionan tres canchas, aunque aspira a ampliarse. Allí su misión es darles cobija a 120 niños de entre ocho y trece años que provienen de familias de bajos recursos, asistiéndolos no sólo con indumentaria y ayuda psicológica sino también con transporte, fomentando el deporte como vehículo de inclusión. Su primer meeting apuntó, por ejemplo, a analizar los resultados del diagnóstico que fueron aplicados a los padres de las familias que están amparadas bajo su proyecto solidario, pero además empezó a trazar los que será el 2023. Trazando alianzas -como la que firmó el jueves con la fundación Elías Bechara Zainúm- para intentar “contrarrestar aquellos factores o problemáticas sociales que emergen” en la población aunque a la vez incentivando la práctica del fútbol y del deporte y el impacto positivo que generan en la sociedad.

Es un 9 laburante, Borja. Quien tendrá en diciembre un amistoso previo al viaje a Buenos Aires, pues participará del match entre los Amigos de Miguel Borja contra la Primera C de Tierralta, un modo de acercarles a las estrellas colombianas a la gente de su pueblo. Sin ir más lejos, el año pasado del partido a beneficio participó nada menos que Juan Guillermo Cuadrado, de Juventus.

No obstante, Miguel Ángel también ve hacia adelante. Su regreso para reincorporarse a un River donde su aporte fue creciendo hasta transformarse en el goleador del semestre: el Colibrí convirtió nueve en la Liga en 18 partidos, pero solamente en la mitad fue titular. En total disputó 985 minutos con un gran promedio de 0,5 por encuentro. Aunque íntimamente confía en que con una pretemporada y un semestre de adaptación completado, lo mejor está por venir. Claro que antes cumplirá su misión: la de ayudar a quienes más lo necesitan.