Exequiel Moreno Godoy es un vecino de Neuquén capital que entre otras cosas se dedica al recupero de especies, en este caso la araucaria, pero lo hace de una forma particular colaborando con gran cantidad de espacios públicos de la provincia.
Exequiel, brigadista ambiental y activista para el recupero de especies, comentó a LU5 que no percibe fondos de ningún tipo y como papá comenzó a sembrar y entregar ejemplares de araucarias a establecimientos educativos y estatales. “La idea surge en aquel tiempo cuando inició la pandemia, con mi esposa vimos la noticia fatídica del incendio forestal que ocurrió en la cordillera. Me vi obligado a no ignorar ese hecho, esa misma mañana salí a comprar piñones a una feria que tenemos acá en el barrio Villa Ceferino. Con mi familia se nos ocurrió plantarlos y a los seis meses teníamos brotes de piñones“, expresó el activista.
Lo primero que se le ocurrió fue llevar los primeros brotes a una plaza cercana para plantarlos, pero quiso ir más lejos. Aprovechó la gran cantidad de botellas de plásticos que quedaban tiradas en una cancha del barrio Ceferino para reutilizarlas como macetas. De esta forma, junto con una gran cantidad de gente que se sumó a su iniciativa, comenzó a repartir plantines de araucaria por distintas instituciones y escuelas públicas con la intención de que cada establecimiento tenga un símbolo cultural de la provincia.
Hasta la fecha, ya sembró plantines en Gendarmería Nacional, la vecinal Barrio Progreso, Comisaría Tercera, Escuela Sylvia Roggetti Nº 197, Escuela Especial Nº 15, Escuela Especial Laboral Nº 2, Escuela Especial Nº 20, Escuela Domingo Sabio, Escuela Nº 268 de Senillosa, entre otras.
“Elegí este árbol primeramente porque es mío, de mi zona, de mi provincia, pero por sobre todas las cosas porque no voy a estar bajo la sombra de él. Tarda alrededor de 80 años en crecer. Hay más de 350 escuelas en la provincia, en cada colegio hay entre 500 y 1000 alumnos, si le llevo cuatro semillas a cada alumno, de acá a un año estamos hablando de más de un millón de ejemplares de araucarias en Neuquén por fuera de lo que es la cordillera”, explicó el activista.