El documental «Los medios de la guerra», coproducido por Télam y Radio y Televisión Argentina (RTA) que indaga cómo algunos medios nacionales y extranjeros ocultaron, mintieron y tergiversaron información sobre la guerra de Malvinas, llegó a Paraná y emocionó a los estudiantes, jóvenes, excombatientes y profesionales que asistieron a su exhibición.
Las voces de fotógrafos, especialistas y periodistas; sus trabajos e imágenes jamás vistas de la cobertura de Argentina Televisora Color -nombre de la Televisión Pública en 1982-, cables y fotos recuperadas del archivo de la agencia nacional de noticias Télam provocaron expresiones de asombro, desazón, bronca e incluso lágrimas.
«Es muy fuerte porque trae muchos recuerdos, estuve ahí y me tocó sufrir la (falta de) vestimenta (militar acondicionada), el frío y la comida», dijo Jorge Benítez, veterano de Guerra oriundo de Corrientes, que tras el regreso vive en Paraná y dirige una biblioteca en la cual -señaló- «sólo se habla de Malvinas».
Entre Ríos «tiene mucho que ver con la causa, con muchos entrerrianos» involucrados en el conflicto bélico del Atlántico Sur, consideró, y recordó que de esa provincia mesopotámica fueron los combatientes más jóvenes: tres adolescentes de 15 años.
A los «medios privados no les gusta enfrentarse a sus propias miserias, nosotros lo hacemos (a través del documental) y buscamos abrir el juego, por un periodismo que no mienta ni distorsione la realidad, sino generar un debate de ideas», sostuvo Bernarda Llorente, presidenta de Télam, quien encabezó la proyección junto a su par de Radio y Televisión Argentina (RTA), Rosario Lufrano.
El documental muestra documentos desclasificados en Argentina y Gran Bretaña; material confidencial de la inteligencia militar; cables originales, diarios y revistas para dar cuenta de la construcción de noticias falsas y omisiones en torno al conflicto en el Atlántico Sur de 1982.
«Los medios de la guerra» cuenta que la primera fake news del conflicto es una foto montada en la hoy exEsma con un grupo de soldados que sostienen una bandera argentina simulando estar en Malvinas, y que no fue la única: también se contrataron especialistas para montar otra fotografía de un buque inglés abatido.
Esas mentiras «siguieron estos 40 años, y cuando volvimos y empezamos a decir lo que de verdad sucedió, lo que muestra el documental, nos trataron de loquitos, incluso hoy en día», apuntó Benítez, y reclamó que «hoy hay soldados que todavía no tienen atención psicológica».
El auditorio «Rodolfo Walsh» de la Facultad de Ciencias de la Educación (Fcedu) de la Universidad Nacional de Entre Ríos (UNER) fue el lugar que recibió a Llorente y Lufrano.
Llorente indicó a Télam que antes del proceso de producción del documental «se pensaba que había pocos datos» pero al investigar notaron que la información «existía, pero los argentinos no tenían acceso» a muchos archivos que fueron «vapuleados, se perdieron o vendieron».
«Se vendían -continuó- fotos a 500 o 1.000 dólares, con medios internacionales desesperados por cubrir la guerra como un negocio. Pero también encontramos archivos tirados, mal catalogados y ocultos».
De los presentes que tomaron el micrófono, Rubén señaló «cómo el engaño está presente permanentemente» en las comunicaciones, y llamó a «no olvidarse nunca de eso»; mientras que Sonia recalcó que se trató de una guerra «con un reclamo legítimo pero demencial por quiénes la decidieron».
«A los medios privados no les gusta enfrentarse a sus propias miserias, nosotros lo hacemos y buscamos abrir el juego, por un periodismo que no mienta ni distorsione la realidad»Bernarda Llorente
La guerra «primero se vivió con un gran apoyo y euforia», pero en un contexto mediático de una dictadura cívico militar que se había mantenido «con la censura, manejo de medios, manipulación y fake news como principales herramientas», recordó Llorente, algo que «también pasaba en Gran Bretaña».
Y agregó que la dictadura cívico militar «se va resquebrajando con mucha corrupción, terror, ataques, y negocios con la plata y vida de los argentinos»; y tras la guerra tuvo lugar una «desmalvinización con los héroes que aportaron su heroísmo y patriotismo» y que «costó muchos años que el Estado se hiciera cargo».
El documental busca «repensar esta historia que tiene tanto futuro», ya que se trata de un reclamo de soberanía «que sigue atravesando a todos», mencionó.
Por último, Llorente indicó que Télam está en proceso de firmar convenios con todas las bibliotecas populares del país para difundir el documental, y con el Ministerio nacional de Educación y sus pares provinciales para que el documental pueda integrar «el material curricular» de las escuelas.
En tanto, Lufrano coincidió con Llorente y remarcó la «obligación» que tiene el Estado de «abrir archivos» y «conservarlos para tener memoria», contra «una estructura mediática y de poder que intentan ocultar esas cuestiones hoy en día», y por eso se mostró a Télam «orgullosa» del documental.
«Y no hay algo peor que imponer el silencio y ocultamiento, de lo que se caracterizó la dictadura, pero también hubo una sociedad que le dio la espalda y tardó mucho en incorporar a esos muchachos que fueron a dar su vida y a esas familias que habían perdido a sus familiares»Rosario Lufrano
Respecto a la guerra, puntualizó que encontró coincidencias entre Argentina y Gran Bretaña con sus dos gobiernos (el de Margaret Margaret Thatcher y el de Leopoldo Galtieri) que buscaban «salvar su gestión e intentaban perpetuarse», y que Argentina «mandó a los chicos a pasar hambre, frío, y a los que volvieron se les impuso el silencio».
«Y no hay algo peor que imponer el silencio y ocultamiento, de lo que se caracterizó la dictadura, pero también hubo una sociedad que le dio la espalda y tardó mucho en incorporar a esos muchachos que fueron a dar su vida y a esas familias que habían perdido a sus familiares y no tenían una tumba para despedirse», sostuvo.
La decana de la Fcedu, Aixa Boeykens, y la directora de LT14 Radio Nacional Paraná, Silvina Ríos, fueron las moderadoras de la tarde noche.
Boeykens consideró que el documental «es una manera de seguir interpelándonos con distintas lecturas» sobre la guerra, al tiempo que Ríos dijo a Télam que la proyección «es muy emocionante» y demuestra «que lo que pasaba con los medios en ese entonces sigue pasando hoy».
Fotos: Hernán Saravia.Fuente: Telam