Insaciable. Boca no para. Mientras festeja su segundo título en el año, luego de haber obtenido la Copa de la Liga en mayo pasado, en el horizonte cercano aparecen otras dos posibles conquistas como para cerrar un 2022 inolvidable. En las próximas dos semanas, el equipo dirigido por Hugo Ibarra podría dar dos vueltas olímpicas más. Ya se acerca Nochebuena, ya se acerca Navidad…
¿Cómo es esto? Boca acaba de consagrarse campeón del torneo de la Liga pero acá no terminó su colección de títulos. Aún le queda la Copa Argentina y el Trofeo de Campeones. Veamos:
La Copa Argentina
Este miércoles, en el estadio San Juan del Bicentenario, Boca enfrentará a Patronato por una de las semifinales. A partir de las 21.30, los dirigidos por el Negro Ibarra irán en busca del pase a la gran final. La otra semi también será el miércoles, entre Talleres y Banfield, pero más temprano (a las 18 horas) y en otra sede (el estadio Marcelo Bielsa de Rosario). Los dos ganadores disputarán el partido decisivo el próximo domingo, en horario y estadio a confirmar.
Boca contra Patronato. Se verán las caras en la Copa Argentina.
Trofeo de Campeones
Este título lo disputan el ganador de la Copa de la Liga con el ganador del torneo de la Liga. Como Boca resultó ser el vencedor de ambas competiciones, su rival en la final a partido único saldrá de un desempate entre los dos subcampeones. Es decir, Tigre y Racing. Dicho encuentro entre los de Victoria y los de Avellaneda está previsto para el miércoles 2 de noviembre con sede sin confirmar aún. Y el vencedor deberá enfrentar a Boca el domingo..
El Trofeo de Campeones por el que irá Boca.
Así las cosas, podría darse la situación de que Boca dé tres vueltas olímpicas en tres domingos consecutivos. Este domingo ganó el torneo, el que viene es la final de la Copa Argentina y el siguiente, el del Trofeo de Campeones. O sea que, en el mejor de los casos, terminaría el 2022 con cuatro títulos, con dos victorias en los dos superclásicos disputados y ya sin Gallardo como DT del eterno rival. Un año boquense.
Fuente: Olé