Gabriel Arias
Tres buenas atajadas: atoró un mano a mano de Borja, luego le contuvo al colombiano un remate muy exigido y además le sacó un tiro a Herrera. En los goles, poco que hacer: el Colibrí definió bárbaro en el primero; en el segundo el arquero estaba tapado.
Fuente: Olé