Cada vez son más las personas que eligen opciones ecológicas para su estilo de vida, no sólo para sus viviendas y alimentación sino también para su vestimenta y calzado.

En el caso de la moda, la diferencia principal reside en la manera en la que se confeccionan. Los materiales que se utilizan son distintos que para cualquier otro tipo de tela y en su elaboración se descarta la utilización de químicos, pesticidas o fertilizantes.

En Junín de los Andes, un grupo de alumnos se sumó a este concepto a partir del proyecto de biotextiles comenzó a tomar forma a principios de año en la Escuela Taller Laura Vicuña.

La iniciativa surgió de la profesora del Laboratorio Escolar, Florencia Romero y de la profesora de Corte y Confección, Marina Barrientos, y fue presentada a las estudiantes del quinto año.

En diálogo con LU5, Barrientos explicó que los biotextiles se desarrollaron a partir de una mezcla de agar agar (un alga), glicerina, agua y residuos de vegetales o de frutas, que luego se vuelca en un molde para su secado y posterior uso.

En el caso de los bio hilos su composición principal es el alginato de sodio, proveniente de algas comestibles, a partir del cual se forman hilos listos para la confección, señaló la profesora. 

“La producción de estos materiales permiten repensar la industria textil desde un lugar más amigable con la naturaleza, reduciendo procesos textiles y la cantidad de residuos generados”, consideró Barrientos.

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