El compositor, pianista y cantante colombiano Nicolás Ospina, reconocido en la escena del jazz y también por sus aportes a solistas como Fonseca y Marta Gómez, acaba de publicar su tercer disco solista “Tumbos” donde incorpora ritmos latinoamericanos y con el que por primera vez alcanza una edición local.
“Desde hace mucho tiempo me vengo interesando por los ritmos latinoamericanos y la riqueza que tienen. Me gusta poder darle un sello latinoamericano a las cosas que hago. Es parte de mi identidad y creo que hay mucho por hacer en ese campo todavía”, postula Ospina durante una charla con Télam por la salida de “Tumbos”.
El registro donde desde el piano y con enorme libertad expresiva visita el bambuco y el currulao (músicas de Colombia), el festejo peruano y la tonada llanera de Venezuela, tiene también personales versiones de clásicos como «Tonada de Luna llena», «El Surco», «Ojo al Toro» y «El moro», en un atractivo viaje sonoro que desembarca a nivel local por medio del sello entrerriano independiente Shagrada Medra.
Consultado acerca de esta experiencia que lo reúne con el sello impulsado desde 1994 por sus colegas Carlos “Negro” Aguirre, Luis Barbiero y Ramiro Gallo, el músico indica que “estar en Shagrada Medra es volver a conectarme con ese mundo tan amplío que tiene la música del sur y a lo mejor abrir nuevas puertas creativas y alianzas futuras”.
Con dos discos anteriores, “Entre espacios” y “Girando para atrás”, escuchar a Ospina es adentrarse en una sonoridad que rompe fronteras estilísticas, algo que sumado a su faceta como cantautor le permite afirmar que “en la canción siento que puedo explorar muchísimo a nivel creativo y en el jazz también, pero me siento un poquito menos libre”.
Télam: ¿De qué manera se conecta “Tumbos” con tus anteriores álbumes como solista?
Nicolás Ospina: Hay una clara similitud en los tres trabajos y es que en todos ellos el piano cumple un papel muy protagónico. En un formato de trío, interactuando con la voz o como solista siempre he intentado que el piano sea uno de los pilares para mis composiciones.
T: ¿Cuánto te ha aportado trabajar artistas tan diversos como Marta Gómez y Fonseca?
NO: Entre más experiencias pueda tener uno en la música mejor. Con Fonseca toqué en escenarios y festivales muy grandes, tuve contacto con entes y mecanismos de la industria diferentes a los que estaba acostumbrado y con Marta también tuve contacto con otros mundos musicales. Al final todo te da herramientas nuevas que puedes utilizar ya sea para acercarte más a lo que quieres o para alejarte más de lo que no quieres.
T: Al respecto ¿qué significó trabajar con Melina Moguilevsky para “Arbola”?
NO: Trabajar con Melina fue una experiencia muy bonita. Fue de los trabajos que me empezó a acercar al mundo de la canción. Y me gustó que ahí confluyeran la canción, la voz, la letra, la poesía, la improvisación, el jazz y el folclore… todas cosas que me encantan.
T: ¿El hecho de lanzar “Tumbos” en Argentina anuncia próximas visitas o una relación más fluida con la escena local?
NO: Puede que sea coincidencia pero estaré a final de año haciendo un par de conciertos en Buenos Aires, Olavarría y a lo mejor en Paraná, cosa que no hago hace más de tres años.
Fuente: Telam