No arrancaba. Ese motor estaba con desperfectos. Funcionaba, de a ratos, en los entrenamientos. Pero en pista se quedaba. Pero una noche, Johan Carbonero, aquel jugador cuestionado en sus primeras apariciones por malos rendimientos, despegó definitivamente. Contra Defensa y Justicia ya había evidenciado una mejora en su andar, y frente a Atlético Tucumán profundizó ese crecimiento con su mejor producción desde su llegada a Racing.
El colombiano de 23 años no convirtió, aunque hizo casi todo bien en la victoria por 2-0 que le permitió al equipo de Gago alcanzar al Decano quedar como escolta. El cafetero se ganó el primer reconocimiento de los hinchas, lo mimaron compañeros y también un colega del extranjero muy conocido por la Academia.
«Estás cuidando bien esa casaca», le escribió en un posteo Roger Martínez, su compatriota y de pasado con brillo en Racing. «@rogermartinez94, como usted lo hizo, Tanque», le respondió el ex Gimnasia al actual futbolista del América de México. El extremo se fue de la cancha en medio de los aplausos de un Cilindro que lo premió por un desempeño al que sólo le faltó el gol.
Carbonero y sus ida y vuelta con Roger Martínez
En su segundo encuentro consecutivo como titular, Johan fue imparable por la izquierda. Cada vez que encaró desequilibró con desbordes, fue indescifrable por sus gambetas hacia los dos perfiles, hizo daño desde su aceleración en los metros finales, pateó al arco cuando enganchó hacia adentro… Y formó un tándem interesante con Eugenio Mena. Una nueva sociedad de extranjeros que continuó afuera de la cancha. Más precisamente, en las redes.
LA SOCIEDAD CARBONERO – MENA
«¡Qué jugador mi panitaaaaaaa! Dale, encará a todooooo!», le dedicó Eugenio Mena, como si fuera un pase largo al vacío. Y el cafetero le jugó una devolución clara: «@eugeniomena3, sí, sí, sí, pasame por la espalda que te la doy, mi panitaaa». Asimismo, en una de las historias de Instagram, Carbonero subió la imagen del momento en que se retiraba de la cancha con gratitud (a los 30′ del ST lo suplantó Hauche) para con los aplausos de la gente desde todos los costados del estadio. «¡Muchas gracias!», escribió.
El colombiano y Mena también tiraron paredes en redes.
Le costó a Johan acomodarse en la Academia. Luego de sobresalir en el Lobo, sus primeras presentación con la camiseta de la Academia no habían sido buenas. Se lo veía contenido, con mucho juego hacia atrás. Pero poco a poco se fue afirmando. Sus compañeros siempre supieron del potencial técnico, pero le pedían que ayudara más en los retrocesos para la recuperación del balón.
JOHAN SE FUE SOLTANDO
El colombiano nutrió su confianza, empezó a animarse a buscar el uno contra uno con la misma determinación que ostentaba en Gimnasia. Hoy, decididamente, está por encima de Gabriel Hauche, quien viene yendo al banco de los suplentes. Y de no ocurrir nada extraño, seguirá jugando de entrada contra Colón, el viernes.
Carbonero desembarcó en Racing en el último mercado de pases en una operación por la que Racing le pagó 3.800.000 dólares Once Caldas por el 75% de la ficha. Con vínculo hasta diciembre de 2026, el extremo lleva disputados 13 partidos, cuatro de ellos desde el inicio. En el medio, antes de su levantada en su nivel, sufrió un desgarro que lo marginó de varios compromisos. Johan se destacó y volvió a ser el que se destacaba en el Gimnasia de Gorosito. Racing lo celebra.
Fuente: Olé