Una de las historias de este domingo no estuvo vinculada a un partido, sino que algo que sucedió en las redes sociales. De la nada, la cuenta de Twitter de Iker Casillas realizó una curiosa publicación. Este generó un importante revuelo por su contenido y se viralizó rápidamente, hasta Carles Puyol le respondió, pero más tarde lo borró y aclaró que fue culpa de un hackeo.
Iker Casillas sorprendió a todos sus seguidores con un mensaje en la red social del pajarito. «Espero que me respeten: soy gay. #felizdomingo«, escribió el español. En el momento de la publicación no se sabía el motivo de la misma. Se especulaba con que lo habían hackeado o si era una movida suya para que, de esta manera, lo dejen de relacionar con mujeres.
El tuit de Casillas y la respuesta de Puyol.
Poco después de una hora de publicado, el tweet fue borrado y media hora más tarde aclaró la situación. «Cuenta hackeada. Por suerte todo en orden. Disculpas a todos mis followers. Y por supuesto, más disculpas a la comunidad LGTB«, escribió el ex Real Madrid. En el tiempo que estuvo disponible, el posteo alcanzó más de 250 mil likes, 50 mil retuits y 40 mil respuestas.
LA RESPUESTA DE PUYOL
Entre las miles de interacciones que consiguió el tweet, la que más llamó la atención fue la de Carles Puyol. El histórico jugador del Barcelona y compañero de selección de Iker Casillas en los grandes éxitos de España le siguió la broma y respondió: «Es el momento de contar lo nuestro, Iker«, junto a dos emojis (un corazon y una cara tirando un beso).
Más tarde, el defensor pidió disculpas por su respuesta a modo de chiste en la publicación de Iker Casillas. «Me he equivocado. Perdón por una broma torpe sin ninguna mala intención y absolutamente fuera de lugar. Entiendo que puede haber herido sensibilidades. Todo mi respeto y apoyo a la comunidad LGTBIQA+», lanzó.
LA CONSECUENCIA DEL POSTEO
Como era de esperar, el tweet de Iker Casillas se volvió viral rápidamente y se convirtió en Trending Topic. Gran parte de las reacciones ante este mensaje fueron negativas y muchos lo dejaron de seguir. Pasó de tener 12.3 millones de seguidores a 9.6 millones, lo que supone una perdida de casi tres millones (una cuarta parte).
Fuente: Olé