Es el mozo favorito del restaurant de Núñez. Cuando se ata el delantal y encara hacia las mesas, los comensales lo ven venir y automáticamente levantan la mano. Con los ojos bien abiertos, Nicolás de la Cruz mira, analiza el panorama, busca la mejor opción y siempre la deja servida en bandeja. Y así, mientras cosecha grandes propinas en un presente auspicioso, el volante de River está muy cerca de romper el récord de asistencias del Pity Martínez en la era Gallardo.

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Pase a pase, se convirtió en una pieza insustituible en el medio. Luego de su ausencia durante la convocatoria a la selección de Uruguay en la última fecha FIFA -clavó un golazo de tiro libre- y de perderse el partido ante Argentinos por una molestia en la rodilla derecha, reapareció ante Estudiantes a lo grande: el motor de River arrancó con tanque lleno y se despachó con tres pases donde mostró todo su repertorio y la versatilidad con la que enriqueció su juego.

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Juanfer a pura risa con De la Cruz. Prensa River.

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En el 1-0 de Borja, metió un lindo toque de zurda en el momento preciso para evitar que el colombiano quedara en offside. El tercero de Solari llegó tras una corrida desde su propio campo y un milimétrico pase filtrado, de derecha, para desactivar a la defensa de Estudiantes. Y en último, con mucha visión de juego, se la dio redondita a Barco para completar un encuentro en el sumó el 88% de efectividad en toques al pie de un compañero y que terminó jugando como volante central.

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Además de ser el sexto jugador en la era Gallardo en dar tres asistencias en un partido (Pity Martínez, Matías Suárez, Gonzalo Montiel, Julián Álvarez -x2-, Elías Gómez y Agustín Palavecino), DLC, el típico enganche moderno -tal como lo definió MG- alcanzó los 33 pases gol desde su llegada al club en agosto de 2017 y quedó a sólo tres de superar los 35 del Pity Martínez, que hace varios años lidera la tabla en ese ítem.

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De la Cruz y un partidazo ante el Pincha. Foto: Juano Tesone.

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Con cuatro partidos por delante en la Liga Profesional antes de meterse de lleno en el Mundial con la Celeste, el uruguayo de 25 años intentará cumplir el objetivo teniendo en cuenta que la posibilidad de emigrar siempre está latente, y sobre todo si la rompe en Qatar. Eso sí, a pesar de que la renovación de su contrato que se vence el 31/12 se sigue estirando mucho más de lo previsto, no va a armar las valijas sin antes poner el gancho.

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Acordados los números con De la Cruz, sólo resta definir la duración del nuevo vínculo, que podría ser hasta 2024 o 2025. Y a la par, la CD a la vez negocia con el Liverpool de Uruguay la compra de un porcentaje extra de Nico (tiene el 30%). Por lo pronto, mientras buscan la lapicera y afinan cifras, Gallardo está tranquilo: cuando lo llama, De la Cruz assistance siempre está.

Los pases gol de DLC ante Estudiantes

Fuente: Olé

Por admin

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